Alimentos enlatados

¿Es posible cocinar un plato rico y nutritivo abriendo simplemente una lata? Sí, es posible. Te contamos cómo hacerlo. Tener una lata siempre a mano en tu despensa te salvará de cualquier comida o cena improvisada.

Ricos, sabrosos… y cómodos, los alimentos conservados en lata nos pueden salvar de una cena o comida imprevista en cualquier momento, ya que son fáciles y rápidos de preparar. Pero no solo eso. También son alimentos nutritivos y que mantienen intactas todas sus propiedades.

Verduras, frutas, legumbres, pescados… Prácticamente todos los alimentos tienen cabida en una lata, y además mantienen sus propiedades nutritivas completas, ya que el proceso por el cual se conservan en lata no modifica ninguna de ellas.

Ventajas de los alimentos enlatados

Además de la comodidad y la facilidad con la que podemos preparar una comida rica y con todas sus propiedades, los alimentos en conserva nos aportan otras muchas ventajas.

El proceso por el que los alimentos se conservan en latas no hace que pierdan sus propiedades nutritivas, las cuales se mantienen prácticamente intactas. Esto se consigue porque, en su mayoría, los alimentos se enlatan justo después de su recolecta o captura. De esta forma mantienen todas sus propiedades, así como su sabor y aroma naturales.

Otra ventaja es que los alimentos se mantienen en perfecto estado durante largos períodos de tiempo (meses, incluso, en algunos casos, años). Las latas impiden que los alimentos entren en contacto con el oxígeno y el agua, y también impiden el paso de la luz, por lo que estos no se ven alterados.

Nos permiten consumir alimentos que no son de temporada durante todo el año, así como productos de otras regiones, permitiéndonos una amplia variedad de platos, que podemos preparar en muy poco tiempo, de manera rápida y fácil.

La comodidad y facilidad para preparar estos alimentos no está reñida con la calidad de los mismos. Los alimentos enlatados nos permiten preparar un plato sabroso y nutritivo cuando no tenemos tiempo para cocinar.

Las latas de conserva tienen un precio asequible y nos ofrecen una amplia variedad de alimentos, que nos permiten consumirlos en cualquier época del año, de forma rápida, fácil y segura.

¿Por qué en lata?

Las latas de conserva de alimentos se fabrican con acero recubierto de estaño. El acero hace que la lata sea resistente y permite la conservación del alimento por largos períodos de tiempo sin que este sufra ningún tipo de alteración.

Es un material reciclable, por lo que las latas pueden reutilizarse como materia prima en la fabricación de nuevo acero. El acero es, además una material reesistente, lo que también facilita su transporte, al soportar golpes o caidas sin que ello afecte a los alimentos en su interior.

El proceso de enlatado

Los alimentos se calientan, se esterilizan y se envasan al vacío en una lata, de forma que se elimina cualquier organismo o bacteria y los restos de pesticidas que pudieran tener. Una vez cerrada herméticamente la lata, se somete a temperaturas de entre 100º y 150º. El alimento puede conservarse así, sin sufrir ningún tipo de alteración, durante un periodo extenso de tiempo.

Prácticamente casi cualquier alimento puede ser sometido a este proceso. Además, y en contra de lo que se piensa, a los alimentos enlatados no se les añaden conservantes, ya que este proceso de esterilización es suficiente para que se conserven adecuadamente hasta su consumo.

 

¿Hacemos un trato?

A cambio de tu email, te enviaremos regularmente contenidos siempre mediterráneos.
¿Aceptas? ¡Suscríbete!



En cumplimiento del artículo 5 de la Ley 15/1999, por el que se regula el derecho de información en la recogida de los datos, se le informa que la recogida de datos tendrá como finalidad única la comercial. Igualmente le informamos que puede ejercer los derechos de acceso, rectificación, cancelación y oposición establecidos en dicha Ley contactando con nosotros a través de nuestro correo electrónico.