Navidad sin estrés
Estas fechas son sinónimo de paz, ilusión y armonía familiar. Pero también implican eventos, compras, comidas familiares que nos generan tensión ¿Cómo controlarla?
La clave para que las Navidades no te resten energía y sea una etapa tranquila y feliz está en la interpretación que le des. “Si la vives como una prueba, un casting o un examen en el que todo tiene que salir a la perfección, seguro que te estresas”. Así lo explica la psicóloga y coach Patricia Córdoba, que resalta la importancia de “buscar un equilibrio entre lo que demanda el ambiente y lo que tú quieres realmente”. No tienes por qué hacerlo que se supone que es obligatorio en estas fechas”.
Estos son sus consejos para que este año no se te atragante la Navidad:
- ORGANIZACIÓN
En esta época es inevitable coincidir con una gran masa de gente comprando, pero puedes buscar alternativas para ir a un ritmo más tranquilo. Por ejemplo: haz algunas de tus compras por internet, intercala estos momentos con otros de ocio (aprovecha para comer con algún amigo si vas a por los regalos), prepara una lista anticipada de lo que quieres comprar y dónde para optimizar tu tiempo…
- DELEGA Y PIDE AYUDA
Si eres controlador, en estas fechas puedes llevar especialmente mal el hecho de que algunas tareas se escapen a tu control, porque no des abasto y no puedas encargarte de todo. No intentes controlar todo y deja que otros participen y te echen una mano: aprende a trabajar en equipo.
- PLANIFICA Y SIMPLIFICA
Si la reunión familiar va a ser en tu casa, procura no intentar hacer ese día la receta más complicada, sino una que domines. También puedes encargar a cada comensal que traiga un plato para compartir u organizar un amigo invisible para hacer más divertida la celebración sin volverte loco con los regalos.
- INCORPORA EL DESCANSO A TU LISTA
Está bien que te ilusiones organizando, asistiendo a reuniones familiares o de empresa, y participando en todos los eventos que quieras, pero busca algún momento para desconectar mentalmente, para estar solo.
- PUEDES DECIR “NO”
Estás a tiempo de plantearte qué quieres hacer, a quién quieres ver, cómo quieres relacionarte y cuánto. Tal vez tengas que negociar con tu pareja o con tu familia, es normal, pero es importante que también sepas, sin sentirte culpable, que no tienes que decir “sí” a todo.
- IGNORA LOS COMENTARIOS
No todo el mundo pasa por las mismas circunstancias, y los excesos pueden fomentar los enfrentamientos. No te alteres (sugerencia: (“No te desgastes”), cambia de tema y tira del humor para afrontar las situaciones complicadas con la familia. Un día es un día.
