Sopa navideña
Vamos a elaborar un buen caldo al que acompañaremos con unos cilindros de pasta rellena.
Al nombrar la pasta, siempre pensamos en Italia, cuando es un producto a base de diferentes harinas de algunos cereales y agua, que se consume en el mundo entero desde hace miles de años. No voy a quitarle el mérito que tienen, por haber elevado a excelencia la misma en sus diferentes recetas.
Diferenciamos dos clases de pastas, la seca y la fresca. La primera se elabora con sémola de trigo duro y agua, y la segunda con harina de trigo, huevo, agua… o vino. Hoy en día existen múltiples variedades y estilos de pastas elaboradas con diferentes harinas, incluyendo el arroz.
Si queremos elaborar nuestra propia pasta fresca casera es muy fácil. Necesitaríamos para cada 500 gr de harina, 10 gr de sal, 5 huevos y 5 cl de aceite suave, que puede ser de girasol u oliva. Tras mezclar y amasar bien los ingredientes dejaríamos reposar la masa durante unos 10 minutos antes de estirarla y cortarla a nuestro gusto.
Pero vamos con nuestra receta. Elaboraremos un caldo que podría ser solo vegetal o con más fundamento, añadiendo carne.
Quiero huir del típico caldo de puchero, porque quien lo cocine ya tendría la base de este plato. Pero me inclino por un plato único al que elaboramos el caldo.
INGREDIENTES:
- 3 o 4 litros de agua (caldo resultante alrededor de 2 litros).
- Media gallina
- 2 huesos de ternera
- 2 huesos de rodilla de ternera
- 2 huesos de espinazo de cerdo (puede ser salado)
- 2 huesos de caña con tuétano
- 2 huesos o punta de jamón (optativo)
- 1 puerro
- 4 ramitas de apio
- 1 cucharadita de pimienta negra en grano.
- 5 clavos de olor
- Sal
Acompañamos de:
- Una bolsa de pasta en cilindros grandes (dos por comensal)
- 250 gr de carne picada de ternera
- 250 gr de carne picada de cerdo
- 250 gr de setas (en conserva me vale)
- ½ cebolla
- 2 rebanadas de pan duro
- 1 vaso de leche
- 1 huevo
- Pimienta negra en polvo y sal
- Perejil fresco
ELABORACIÓN:
- Procedemos. Primero limpiamos y secamos los huesos. En una bandeja los horneamos durante veinte minutos a 180º. Conseguiremos así un caldo de un color tostado y mucho más sabor.
Olla al fuego, ponemos la gallina, el agua y llevamos a ebullición. Espumamos y añadimos los huesos tostados. Esperemos para volver a espumar y añadimos el resto de los ingredientes.
- Para obtener un excelente caldo. Deberá cocer a fuego lento como mínimo entre 4 y 6 horas. Podría incluso llegar a 24 si fuésemos añadiendo agua a medida que evaporase. De nosotros depende. Podrías terminar en 45 minutos en olla rápida, cosa que no aconsejo.
Tenemos casi hecho el cado. Ha pasado el tiempo que le hemos dado y vamos ahora con el resto de la receta.
- Una cazuela con agua, un poquito de sal. Cuando esté hirviendo vamos metiendo los cilindros de pasta uno a uno para que no se peguen. Operación rápida pues en dos minutos debemos retirarlos y ponerlos en agua fría para cortarles la cocción. Una vez fríos, los pasamos a una escurridera y reservamos.
- Costamos la media cebolla y la rehogamos en una sartén con un poco de aceite. Cuando empieza estar transparente, le añadimos las setas que hemos cortado en pequeños. Salteamos todo.
En un bol, mezclamos las carnes, añadimos el sofrito de setas, el pan que hemos remojado en leche y escurrido, el huevo, la pimienta negra y un poco de sal. Mezclamos todo muy bien.
- Hora de ir rellenando los cilindros ayudándonos con una manga o con una cucharita. Cuidado de no romper nada. Necesitaremos dos por cada ración.
Tenemos el caldo en su punto, que hemos probado de sal y rectificamos si es necesario. Apagamos el fuego y lo colamos.
- En una olla pondremos el caldo necesario para todos los comensales y lo llevamos a ebullición. Iremos introduciendo los cilindros rellenos de carne con cuidado. Uno a uno para que no se peguen. Dejamos cocer 15 minutos.
Servimos en plato hondo el caldo con dos cilindros de pasta rellenos por comensal. Un poquito de perejil fresco cortado finamente…