Contenido de la revista Mashogar elaborado por AVACU, la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios. Aunque su consumo debe ser siempre moderado y dentro de una dieta saludable, variada y equilibrada, el azúcar no es solo una fuente importante de energía sino que también tiene otros beneficios que, probablemente, desconozcas. Sigue leyendo para descubrirlos y aprender más sobre este endulzante.

Fuente de energía e ingrediente principal en nuestras cocinas, el azúcar puede aportarnos beneficios, sin olvidar que un consumo excesivo puede resultar perjudicial para nuestro organismo.

Se desconoce su origen exacto, pero existen referencias al azúcar hace ya 5.000 años. Como en la mayoría de los alimentos, los árabes son quienes descubren sus propiedades y lo comienzan a llevar a las regiones que van conquistando.

Con los años, su cultivo se extiende a través de las diferentes rutas de comercio y se va perfeccionando su procesamiento hasta tal y como lo conocemos en la actualidad.

Se denomina azúcar (común o de mesa) a la sacarosa, un disacárido compuesto por una molécula de glucosa y otra de fructosa que se obtiene normalmente de la caña de azúcar. Dependiendo de su grado de refinación, podemos encontrar azúcar blanco o azúcar moreno. Mientras que el azúcar blanco pasa por un proceso de purificación y refinamiento, el azúcar moreno no se somete a este proceso.

¿Qué tipos de azúcar podemos encontrar en el mercado?

Existen diferentes formas y tipos de azúcar que podemos consumir. Algunos de ellos son:

• Azúcar blanco (o refinado): el más habitual, su grado de pureza en sacarosa es el más alto (un 99%)

• Azúcar moreno: no se ha sometido al proceso de refinación que sí sufre el blanco. Su contenido en sacarosa es de un 96%

• Azúcar glas: es el azúcar blanco molido en polvo muy fino

• Azúcar en terrones: tanto blanco como moreno, se les da la forma de cubos o dados mediante vapor de agua

• Panela: edulcorante natural, sin refinar, derivado de la caña de azúcar a partir de su evaporación, concentración y cristalización.

• Sirope de agave: alternativa de origen vegetal al azúcar, se trata de un jugo dulce que se extrae de la planta del agave, la cual crece en  zonas tropicales y subtropicales de América y el Caribe.

Además, podemos encontrar otras alternativas al azúcar, como pueden ser la sacarina, la estevia o el eritritol.

¿Por qué necesitamos azúcar?

El azúcar nos aporta principalmente energía (unas 398 kcal por 100 g) y es fundamental para el buen funcionamiento de nuestro cerebro y músculos. Su consumo (moderado) ayuda a mantener los niveles de glucosa en sangre, evitando que desciendan y puedan provocarnos mareos, temblores, debilidad física y mental…

Está presente de manera natural en frutas, verduras y cereales integrales, fundamentales para una dieta saludable y el aporte de fibra, vitaminas y minerales.

Sin embargo, un consumo excesivo está asociado a enfermedades como la obesidad, el sobrepeso, las caries, la diabetes, problemas cardiovasculares…

Ahora que ya has descubierto un poco más sobre el azúcar, recuerda que puede aportarte beneficios, pero que un consumo excesivo puede derivar en problemas importantes para nuestra salud, por lo que la moderación en su consumo es fundamental.

¿Cómo se obtiene el azúcar?

Las fuentes principales de las que se obtiene el azúcar son la caña de azúcar y la remolacha. Una vez recolectada la caña, se pica y muele para extraer su jugo. Este líquido se hierve hasta que se evapora el agua y cristaliza. Una parte de esos cristales de azúcar resultantes carameliza y se oscurece, dando lugar a la melaza.

En el caso del azúcar moreno, la melaza le confiere ese color y sabor característico, mientras que para obtener azúcar blanco, se somete a un proceso que elimina la melaza.

Sin embargo, y aunque las diferencias a nivel nutricional son mínimas, el azúcar moreno, como no ha sido tratado en esa última fase y conserva la melaza, mantiene parte de sus vitaminas y minerales. Además, el azúcar moreno es un poco más amargo que el blanco, por lo que en igualdad de cantidades no endulza tanto como este último.