Las propiedades de cada uno de los frutos secos
Los frutos secos, en su justa medida, como todo, son alimentos sanos y con propiedades nutritivas y beneficiosas. Además, la gran variedad existente y las múltiples formas de consumirlos los hacen perfectos para cualquier persona y en cualquier ocasión.
Se denominan frutos secos porque en su composición natural tienen menos de un 50% de agua. Entre sus múltiples beneficios cabe destacar que son alimentos muy energéticos, ricos en grasas, en proteínas y en oligoelementos.
Según el tipo de fruto seco de que se trate, también pueden aportar a nuestro organismo buenas cantidades de vitaminas (sobre todo las del grupo B), además de ácidos grasos esenciales.
Esta composición tan característica los convierte en alimentos idóneos para aportes rápidos de energía y minerales, siendo muy adecuados, por ejemplo, para deportistas o actividades que requieran un gran esfuerzo físico.
Almendras
Son junto a las avellanas los frutos secos más ricos en ácidos grasos monoinsaturados, especialmente en ácido oleico. Las almendras ya aparecen en el Antiguo Testamento y son de los primeros alimentos que se cultivaron en todo el mundo.
Cacahuetes
Nos aportan vitaminas del grupo B y minerales, como el zinc y el magnesio, entre otros y es rico en proteínas. Como aperitivo, podemos encontrarlo con cáscaras, piel, pelados, fritos… Los cacahuetes son las raíces de la planta denominada arachis hypogaea, es decir, que crecen de forma subterránea, algo parecido a las patatas.
Nueces
Otros de los frutos secos más sanos que podemos consumir ya que poseen un alto contenido en omega 3. Se consumen crudas porque al tener un alto contenido en ácidos poliinsaturados, sus grasas se deterioran muy fácilmente con el calor de la cocción.
Anacardos
Son las semillas del árbol que lleva su mismo nombre. Como el resto de frutos secos, sus propiedades beneficiosas se centran en el aporte de minerales como el hierro, fósforo y magnesio y antioxidantes. El fruto de este árbol, originario de Brasil, está dividido en la nuez, que es el verdadero fruto y tiene forma de riñón, y el pseudofruto, de color anaranjado. El fruto o la nuez no se debe comer sino que debe ser pelado y tostado para eliminar el aceite tóxico que posee la cáscara.
Pistachos
Son especialmente ricos en proteínas y en grasas monoinsaturadas. Ya eran consumidos hace más de 10.000 años aunque estaban reservados para la alta nobleza.
Otros aperitivos
Pero no sólo los frutos secos pueden constituir un aperitivo sano y nutritivo; algunas semillas y legumbres, que a veces podemos confundir con frutos secos, poseen también muchas propiedades beneficiosas para nuestro organismo.
Pipas de girasol
Estas semillas nos aportan, especialmente, hierro y magnesio, junto con potasio y fósforo. Un girasol puede contener hasta 2.000 pipas, que se obtienen una vez que la flor se ha secado completamente.
Altramuces
Son legumbres, también llamados lupinos, oleagiosas, redondas, planas y de color amarillo. Su sabor es amargo (debido a los alcaloides), poseen un alto contenido en polifenoles y son una fuente muy rica en proteína vegetal. Como aperitivo, los encontramos en salmuera, es decir, ya listos para su consumo. Se conservan en perfecto estado durante días en un recipiente bien cerrado dentro del frigorífico.
Maíz
El aporte de este cereal se basa principalmente en un alto contenido energético. Nos aporta también fibra e hidratos de carbono, junto a vitaminas del grupo B. Además, al no contener gluten, está especialmente indicado para los celíacos o quienes tiene intolerancia. Como aperitivo podemos tomarlo como quicos (tostado) y en forma de palomitas.