Cómo introducir más fibra a tu dieta
Aumentar la cantidad de fibra en nuestro alimentación tiene múltiples beneficios para el organismo. Por lo general, su consumo está muy por debajo de la recomendaciones sanitarias, así que aquí tienes 7 consejos con los que ingerir más fibra para ganar en salud y mantenerte en tu peso ideal.
La Organización Mundial de la Salud recomienda ingerir entre 25 y 30 gramos de fibra al día, pero la Academia Española de Nutrición y Dietética afirma que solo el 4% de los españoles llega a esa cantidad de forma habitual.
¿Para qué tomar más fibra? En principio, para regular el tránsito intestinal y absorber los azúcares que has consumido. Esta sería la función principal de la fibra, pero hay mucho más.
Varios estudios recientes han demostrado que una ingesta regular reduce el riesgo de sufrir diferentes tipos de cáncer, como los de colon, mama o útero. También que ayuda a rebajar los niveles de colesterol malo y regular la tensión arterial.
Además de prevenir el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, sabemos que la fibra tiene un efecto muy positivo en la microbiota: ayuda a que esté equilibrada y, por lo tanto, a que el organismo funcione mejor. La pregunta es ¿cómo aumentar su consumo? Aquí tienes siete trucos para lograr el objetivo diario. Notarás muy pronto los resultados y ¡te sorprenderán!
- TRES FRUTAS AL DÍA
Si no te gusta mucho la fruta, esto te puede parecer excesivo, pero se trata de un requisito casi de obligado cumplimiento. Puedes camuflarlas en ensaladas o añadirlas a un yogur, pero no deben faltar en tu día. Si quieres ir sobre seguro, las más ricas en fibra son la manzana, la ciruela, el higo y el kiwi. A la hora de comer fruta, mejor opta por la pieza de fruta entera, ya que si la escoges en su versión exprimida estarás descartando gran parte de la fibra que te puede aportar.
- SIEMPRE VERDURAS
Lo ideal sería incluir una ración de verdura en cada comida, pero si te parece demasiado, intenta que, al menos, entre la guarnición se vea algo verde. Si son crudas, siempre será un extra, ya que conservan mejor sus propiedades. Un buen ejemplo sería una pequeña ensalada de espinacas como acompañamiento o lechuga con zanahoria cruda rallada. Dentro de las verduras, las que tienen un mayor aporte de fibra son el brócoli y las coles de Bruselas.
- CEREALES INTEGRALES
En este caso, hablamos de un cambio que apenas se notará en tus recetas más comunes de arroz o pasta. La versión integral se cocina prácticamente igual y admite los mismos ingredientes. En cuanto al pan, ¿aún no te has pasado a la versión integral?
- MÁS LEGUMBRES
Asociamos legumbres con comidas pesadas y calóricas y no es así. Las versiones vegetarianas son una excelente opción para mantener el peso y cuidar la salud. Además, son muy saciantes y evitarán que piques entre horas. Prueba nuevas recetas con legumbres e inclúyelas en tu dieta dos días por semana.
- AVENA EN EL DESAYUNO
Este cereal es uno de los ingredientes más versátiles, por lo que es sencillo integrarlo en tu dieta. Solo una ración de avena puede suponer hasta el 20% de las necesidades diarias. Añadirla al desayuno te ayuda a comenzar el día con energía, contiene proteínas vegetales y es muy fácil de digerir.
- SEMILLAS EN LAS ENSALADAS
De calabaza, lino, o sésamo. La variedad es tan amplia como sus propiedades. Además de enriquecer tus platos con un extra de fibra, también les das sabor y, por lo tanto, podrás reducir la cantidad de aliño.
- FRUTOS SECOS
Seguro que ya has escuchado lo beneficiosas que son las nueces, almendras o avellanas, pero tal vez no sepas que solo un puñado de almendras crudas pueden contener hasta 3 gramos de fibra. Además, cuidan del sistema cardiovascular y ayudan a mantener el colesterol a raya.