El diseño geométrico y clásico le da un aspecto rústico a esta cocina minimalista.
Azul y blanco también para la cocina. Dale vida a las paredes con unos adhesivos de vinilo, que puedes hacer fácilmente con estas explicaciones.

La plantilla:

Amplía este dibujo con la ayuda de una fotocopiadora hasta que alcance la medida adecuada al tamaño de los azulejos. Pasa el diseño a la parte trasera del plástico adhesivo. Para ello, tienes dos opciones: utilizar un pliego de papel carbón y repasar el contorno encima con un lápiz o hacer la plantilla en una cartulina de cierto grosor, recortarla y, después, utilizarla tantas veces como sea necesario. Es muy importante tener cuidado a la hora de recortar, tanto la plantilla como el diseño en el vinilo, para obtener un buen resultado y que todas las siluetas queden iguales.

Material necesario:

Adhesivos de vinilo ya recortados de la medida apropiada al tamaño de tus azulejos. Cinta adhesiva protectora de unos 3 cm de ancho, aproximadamente. Una espátula o cualquier otra herramienta para ejercer presión y eliminar arrugas. Para hacerlos tú misma, necesitas planchas de vinilo adhesivo del color que prefieras y en la cantidad necesaria, papel carbón, tijeras y un lápiz.

1. Si los adhesivos ya vienen precortados, retira las partes que no vayas a utilizar. Para realizar los tuyos, amplía la plantilla y transfiérela con el papel carbón sobre la parte trasera del vinilo y retira igualmente lo que no vayas a usar. Ahora, cubre la parte delantera con tiras de cinta adhesiva.
2. Retira con cuidado el vinilo, que habrá quedado adherido a las tiras de cinta protectora, para de este modo separar el motivo completo del papel encerado trasero. Así, ya tienes el motivo del azulejo perfectamente formado, en un único gesto.
3. Coloca el motivo junto con la cinta sobre el azulejo y ponlo de modo que quede lo más centrado posible. Utiliza la espátula para fijarlo bien y evitar que se formen arrugas o pequeñas bolsas de aire. También puedes utilizar el mango de unas tijeras para ello.
4. Quita las tiras de cinta con mucho cuidado y de una en una, comprobando que la pegatina se queda bien fija sobre el azulejo. Repite esta operación con cada azulejo. En este caso, para la cocina, es recomendable aplicar un barniz adecuado para que los adhesivos no se despeguen.
   

   Paso 1

   

   Paso 2

   

   Paso 3

   

   Paso 4

   Por Manuela Entisne