Con el cambio de estación toca sacar la ropa de verano del armario y volver a colocar la de abrigo. Como sabemos que no es fácil, toma nota de estos consejos prácticos y será coser y cantar.

El primer consejo para que no se convierta en un suplicio inalcanzable y el frío no te pille aún en tirantes es ponerte manos a la obra cuanto antes, sin postergarlo. Reserva el fin de semana para organizar el armario sin prisas y con buena música y piensa siempre en positivo: podrás organizarlo desde cero, limpiarlo y deshacerte de esas prendas que ya no utilizas y así ganarás espacio extra para tus nuevas adquisiciones de moda. Cloti Martínez Peinado, organizadora profesional del hogar, especializada en vestidores, te da las claves para hacer un cambio de armario de temporada de forma inteligente y acertada.

1. Reserva un tiempo determinado y concreto para organizar el armario, sin interrupciones.
2. Pon música que te llene de energía.
3. Vacía el armario del todo y límpialo a conciencia. Prepara tres bolsas grandes y separa lo que no quieres conservar en tres grupos: las cosas que vas a tirar, las cosas que vas a regalar y las cosas que vas a vender.
4. Puedes aprovechar para forrar los estantes y cajones y colocar bolsas aromáticas, algo que quieres hacer siempre y para lo que nunca encuentras el momento.
5. Dispón la ropa que vas a conservar por categorías: camisetas, pantalones, faldas…
6. No guardes la ropa que te da pena tirar para estar por casa o como pijama.
7. Reserva las prendas atemporales y vuelve a introducirlas en el armario con su categoría correspondiente.
8. Lava la ropa de verano antes de guardarla, o estará estropeada en el próximo cambio de armario. Y procura proteger las prendas delicadas en bolsas de tela o envueltas en papel.
9. Deja la ropa para guardar a un lado y saca las prendas de nueva temporada.
10. Organízalas por categorías o tipos de prenda. Puedes echarles una última ojeada antes de colocarlas dentro del armario y decidir si te vas a deshacer o no de alguna de ellas porque ya no vas a ponerla. Si es así, su destino es una de las tres bolsas grandes que has preparado.
11. Repasa las prendas que tengan algún desperfecto o necesiten componerse,.
12. Comienza a colocar las de otoño-invierno sin prisa. Piensa que el tiempo que inviertas ahora lo recuperarás cada mañana al vestirte.
13. Realiza la misma operación con los zapatos. Pon en cajas solo los que uses muy poco y sean muy delicados. Intenta tenerlos todos a la vista.
14. Guarda las prendas de verano en las cajas y bolsas donde tenías la ropa de invierno y ponlas en su sitio hasta la próxima temporada.
15. Cuando termines, deshazte de la bolsa que es para tirar, y después dona, regala y vende. Disfruta de lo bien que has organizado tu armario y el tiempo que ganarás.

Autora: Cloti Martínez Peinado, Home Organizer